Dentro de una visión global de la persona y la salud, la alimentación y lo que nos aporta son un pilar fundamental. La terapia ortomolecular busca el mismo objetivo de salud, mediante la regulación de la vida diaria del paciente y el uso de sustancias naturales como las vitaminas, los antioxidantes, los oligoelementos, los ácidos grasos esenciales, los aminoácidos, etc.
Al igual que en el resto de nuestros tratamientos, en lugar de centrarnos en la enfermedad, lo que haremos será mejorar la salud y calidad de vida utilizando sustancias completamente naturales en combinación con el tratamiento. Por ello además de orientar a nuestros pacientes, es habitual que en los tratamientos nos ayudemos de suplementos naturales y fitoterapia. El objetivo es acortar los plazos de recuperación y una total vuelta a la normalidad, a la salud.